La Tessera del Tifoso: La tarjeta que despertó el odio de las hinchadas en Italia

Una Tessera del tifoso

Qué dirías si de un día para otro los dirigentes de todos los clubes de tu país decidieran unirse y lanzar una tarjeta que te identifique en el estadio con un código personal, como cualquier tarjeta de crédito, que te permite comprar en tiendas, tener descuentos en el cine, en restaurantes, tiendas de música, precios preferenciales para acceder a los estadios, ingreso exclusivos o paquetes especiales para seguir a tu club o selección en competiciones internacionales. ¿Suena bien, no?, a todos nos gustaría algo así, salvo en Italia donde está la escoba con ésta tarjetita llamada Tessera del Tifoso, ya que aparte de todas las bondades y beneficios especialmente que posee, tiene la particularidad de identificarte a la hora de ingresar a un recinto deportivo en toda la península y más allá de sus fronteras inclusive, una idea que los tifosi, los ultras y las principales curvas de ls principales clubes del país donde se juega la Serie A, rechazan de plano

“¡¡¡No a la Tessera del Tiffosso, protesta en el estadio, contra todos los que nos quieren identificar como ganado o gitanos en el estadio!!!”. Así reza una correo que se distribuye entre todos los hinchas de los principales clubes de Italia y que me hicieron llegar hace pocos días. Es un llamado a protestar contra los responsables del lanzamiento de la Tessera, que tiene el único trasfondo de conservar la tranquilidad en los estadios, que en las últimas temporadas se ha visto afectada por manifestaciones, peleas e incluso muertes entre hinchadas rivales, la Tessera del Tifoso es una de las últimas opciones que se juega el ministro del interior de Berlusconi antes de que el problema se le termine escapando de las manos.

El plástico que se comenzó a repartir desde el año pasado, con un precio de 10 euros por persona, debe ser solicitada por cada hincha del club, previa consulta de la entidad futbolística a la policía, ya que si el hincha tiene una condena, pena o falta efectiva o pendiente en los últimos 5 años, simplemente se le niega

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Todo marchaba bien, la tarjetita del hincha se utilizaba en todo tipo de locales y era muy conveniente tenerla ya que según me cuentan amigos que viven en Italia, no la pedían en los estadios y se podían conseguir infinidad de descuentos en todos los productos que se puedan imaginar, hasta que a mediados de la temporada anterior, el gobierno decidió ejecutar la segunda parte del programa, ya cuando se habían adquirido cerca de 500.000 tarjetas en todo el país, desde aquel día “D”, se exigiría a todos los hinchas quieran ir a ver a un equipo su equipo de visita, si no la llevas o no la tienes, no entras simplemente, una medida perfecta para muchos, mientras que para otros (los Ultras), es una clara persecusión y discriminación con todas sus letras.

Los problemas ya comenzaron, ya que el día miércoles que acaba de pasar, el ministro del interior y máximo impulsor de la Tessera del Tifoso, Roberto Maroni, fue protagonista de la salvada de su vida. Ultras del Atalanta lo fueron a buscar a un acto oficial, se enfrentaron a los policías y lograron golpear al ministro, quien les prometió las penas del infierno a los responsables, lanzando un “no volverán a entrar nunca más a un estadio”. La mano derecha de Berlusconi ya no deja a sus guardaespaldas ya que en foros de internet se habla de incluso ir por la cabeza -literalmente- del personero de gobierno (matarlo) en señal de protesta, aunque ésto último está más ligado con la perdida de poder que tendrían las mafias al interior de los clubes al no poder ingresar sus máximo lideres, casi siempre ligados al comercio del narcotráfico.

Dónde vives, tu teléfono, una foto reciente y tu Rut/DNI es lo que se exige para obtener una tarjeta del Tifoso que es esencial para ingresar a los estadios rivales, oportunidad que tiene la seguridad del estadio para individualizar a los hinchas más problemáticos de toda Italia y del mundo muchas veces junto a los ingleses, que aún logran escabullirse  preferentemente en los Mundiales. En los últimos años la concurrencia a los recintos deportivos ha disminuido considerablemente, lo que preocupó a las autoridades en un país donde la palabra fútbol tiene la misma importancia que en Brasil o Argentina.

Los Ultras en una de las tantas protestas

De momento no se han registrado incidentes en la primera fecha de la Serie A que ya pasó, en una medida con muy pocos precedentes a nivel mundial y donde Berlusconi, dueño del AC Milan, que tiene a 220.000 de los más de medio millón de abonados a la Tessera del Tifoso, cree poder imponerse y ganar a un problema que afecta cada día y año a un bien tan preciado en un país de cultura futbolística como la de del italiano común y corriente que se apasiona por el deporte rey ¿Lo logrará?. Si le resulta, ya saben por estos lados donde se discute una forma de erradicar la violencia de los estadios, y tengan por seguro que si todo funciona, a más de alguno en éstas lejanas tierras se le ocurrirá la idea de la Tarjeta del Tifoso como una verdadera forma de controlar la tierra de nadie en la que se convierten muchas veces las canchas de fútbol local.